Chetumal.- El oficial mayor de Gobierno Manuel
Alamilla destacó la importancia del trabajo en equipo que las mujeres
desarrollan hacia el interior del Gobierno del Estado y las calificó de muy
preparadas y capacitadas para atender a la sociedad igual que cualquier
servidor público.
Así lo manifestó durante la inauguración del evento
denominado “Taller para la promoción de la norma mexicana NMX-R-O25-SCFI-2015
en igualdad laboral y no discriminación”, dirigido a servidores públicos
estatales y organizado en una de las salas del Centro de Convenciones de
Chetumal por el Instituto Quintanarroense de la Mujer (IQM), a cargo de Silvia
Damián.
Alamilla dijo que el gobernador Carlos Joaquín ha
asumido el firme compromiso de que en el Gobierno del Estado se brinden las
mismas oportunidades a las mujeres que a los hombres, que esas acciones permeen
y se reflejen en el interior de la administración pública, y que contribuyan a
generar una cultura de respeto y cumplimiento a la igualdad de género en
ejercicio de sus funciones, con libertades y derechos laborales, sin
discriminaciones.
Recalcó el servidor público que la igualdad de
género, los derechos humanos y el trato digno a la mujer no sólo es un reto de
gobierno, sino que también es social, de carácter cultural.
“Inventar, denostar, intimidar, hacer escarnio
sobre el papel de la de la mujer en la vida laboral enaltece el menoscabo de
las luchas sociales de las mujeres por dignificar su participación en la
administración pública” aseveró Manuel.
El oficial mayor indicó que es rara la vez que el
éxito de la mujer se mide porque es una profesional comprometida, eficiente,
capaz, con aptitudes y criterio, pero se acostumbra a criticar por ser prima,
hermana, amante, novia, o amiga de… sin saber su historial curricular o
desempeño laboral.
“Debemos cambiarnos el chip –dijo–, y aceptar que
vivimos tiempos de un nuevo siglo, de la participación activa de las mujeres en
el gobierno, de forma competitiva y profesional. La igualdad sustantiva es
tarea de todos, tanto en el centro laboral como en casa; reconocer la labor de
la mujer por sus méritos, y no lo que se rumora de ella, sería un buen
principio”, exclamó.
Al término del taller, Manuel Alamilla fue el
encargado de declararlo formalmente clausurado y volvió a expresar un breve
mensaje recomendado a los servidores públicos que tomaron el curso para que lo
que aprendieron lo pongan en práctica en sus respetivos centros de trabajo.
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